En los últimos años, los fanáticos del Universo Cinematográfico de Marvel y Star Wars han obtenido numerosos títulos entre series y películas, pero la calidad de muchas de estas producciones ha dejado mucho que desear. De acuerdo con los decepcionantes resultados de los más recientes títulos, sobre todo de Marvel Studios, la compañía del ratón ha tomado una drástica decisión.
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Este jueves, Bob Iger, el presidente de The Walt Disney Company informó que se desacelerará la producción de filmes y series de televisión de ambas franquicias con la meta de reducir costos, y por ende se reducirá el número de proyectos. Esto fue lo que dijo Iger (via CNBC):
Retrocedes no solo para concentrarte, sino también como parte de nuestra iniciativa de contención de costos. Gastar menos en lo que hacemos y hacer menos.
El CEO también señaló que la sobreproducción de series de Marvel Studios para Disney+ terminó diluyendo la atención que se le daba a los largometrajes de la franquicia, que también han sido abundantes en los últimos años:
Marvel es un gran ejemplo de eso. No había estado en el negocio de la televisión a un nivel significativo, y no solo aumentaron su producción de películas, sino que terminaron haciendo una serie de series de televisión. Francamente, diluyó el enfoque y la atención.
Fue en 2009 cuando The Walt Disney Company adquirió Marvel Studios por US$4 millones, y desde entonces la franquicia ha logrado recaudar miles de millones de dólares alrededor del mundo. El punto más alto del MCU se produjo con la llegada de Avengers: Endgame – 95%, cinta de 2019 que se encuentra en el puesto número dos en la lista de películas con mayor recaudación de todos los tiempos, justo por debajo de Avatar de James Cameron.
Después de que Iger renunciara al cargo como director ejecutivo de Disney en febrero de 2020, Bob Chapek asumió la posición de CEO, pero éste último no llevó a la compañía por un buen camino. Luego de un par de malas decisiones que tuvieron gran impacto, su administración dejó a la empresa en una posición financiera complicada y el ejecutivo tuvo que abandonar el cargo. A finales de noviembre del año pasado, Chapek fue destituido del negocio e Iger tomó las riendas nuevamente, esta vez con el propósito de limpiar el desastre de Chapek y regresar la estabilidad a la famosa empresa del ratón.
A principios de febrero de este año, se anunció que Disney entraría en etapa de reestructuración, la cual incluía una inmensa ola de 7,000 despidos, así como una revisión, reorganización y reducción de costos en todas sus ramas que, según las proyecciones de la compañía, resultará en un ahorro de hasta US $5,500 millones.
