Un jefe regional de la autoridad migratoria de México fue acusado este sábado de homicidio por la muerte de 40 personas migrantes durante un incendio en un centro de detención.
Salvador González Guerrero, quien dirigía el Instituto Nacional de Migración (INM) en el estado de Chihuahua (norte), había sido detenido el pasado 16 de abril en la fronteriza Ciudad Juárez, donde ocurrió el incendio la noche del 27 de marzo.
González fue señalado ante el juez por homicidio, lesiones y ejercicio ilícito del servicio público, según informó el Consejo de la Judicatura Federal (CJF). El magistrado ordenó que el funcionario permanezca en prisión preventiva.
Según las autoridades mexicanas, el incendio se originó cuando un migrante prendió fuego a un colchón en la celda donde permanecía con otros 67 hombres, en medio de una protesta por una posible deportación.
Imágenes de una cámara de seguridad mostraron que, una vez desatado el incendio, ni el personal de migración ni el de seguridad hicieron algo por evacuar a los grupos de migrantes.
Un total de 39 migrantes murieron en el lugar, la mayoría por asfixia, y uno más en un hospital.
Otros cuatro funcionarios del INM han sido detenidos, un guardia de seguridad y el migrante señalado como el que inició el fuego.
El comisionado y máxima autoridad del INM, Francisco Garduño, también ha sido señalado en la investigación de la Fiscalía, pero permanece en libertad. El presidente Andrés Manuel López Obrador dijo que continuará en el cargo mientras se determina su probable responsabilidad en los hechos.
Garduño se presentará el 25 de abril ante un juez para responder a los señalamientos de la Fiscalía.
En total perdieron la vida 19 personas guatemaltecas, siete salvadoreñas, siete venezolanas, seis hondureñas y un colombiano que aguardaban en Ciudad Juárez la posibilidad de cruzar a Estados Unidos. La mayoría de los cuerpos ya han sido repatriados.