El líder de la Asociación de Trabajadores Municipales (ASTRAM), Rolando Castro, acusó al empresario Adolfo Salume de diferentes prácticas que violan los derechos de los trabajadores y de diferentes aspectos con los que según Castro, está siendo irresponsable a nivel empresarial.
Estas denuncias, surgidas en los últimos meses y en las que se ha visto involucrado que el empresario, han sido el motivo por el cual actualmente se especifica que Salume enfrentará una gran cantidad de demandas.
«Fito va a enfrentar una cantidad de demandas de todo tipo, partiendo de que él ha sido bien irresponsable en sus declaraciones, y lo último son estas enormes violaciones de la clase trabajadora», declaró Castro.
Las demandas en el sentido laboral saldrán de una reunión, a realizarse este martes, de algunos empleados y exempleados de dichas empresas junto a cuatro abogados laboristas, para realizar el determinado proceso.
Castro arremetió contra Salume y enlistó varias de las violaciones que este ha realizado y que a pesar de ello tiene «la costumbre de calumniar, de difamar, de construir injuria» en medios de comunicación, agregando que «no tiene la más mínima solvencia moral».
Algunas de las denuncias fueron enfocadas al trato laboral de algunas de sus empresas y de los despidos que este supuestamente realizó en las pasadas vacaciones de Semana Santa, periodo en el que se presume se despidieron a más de 70 personas o se les cambio de empresa sin pago de indemnización, obligándoles a renunciar.
«La forma de operar de este señor es que construye otras empresas, él tiene un montón de empresas, entonces lo que hace es que usted tiene que renunciar al tiempo de servicio de la empresa en la que está y le contrata en la otra, iniciando como primer día y perdiendo todo su tiempo», explicó el máximo representante del sindicato.
A la vez, explicó que Salume no permite los sindicatos en sus empresas, como prueba de ello, Castro señaló que en el pasado algunos empleados intentaron crear uno en la empresa Molsa (propiedad de Salume) y este lo destruyó, y actualmente las personas que han sido despedidas de la empresa son las mismas que intentaron crear un nuevo sindicato.
Agregado a ello, se denuncia el maltrato laboral, los descuentos y de manera específica se denuncia que los empleados deben anunciar con anticipación de media hora si deben hacer sus necesidades fisiológicas, y se tiene conocimiento de algunos empleados que incluso han sufrido amputaciones por accidentes laborales con los molinos del negocio.
Dentro de las demandas, Castro informó sobre una multa por prácticas anticompetitivas por una supuesta complicidad con otra empresa en el aumento de precio a la harina.
«Se puso de acuerdo, ese señor, su empresa, con otra empresa para encarecer la harina y para que el pueblo salvadoreño, ese pan francés que come, le llegue caro», informó el miembro de ASTRAM, quien también agregó que seguido de esta demanda, Salume asistió hasta la Sala de lo Constitucional, pero estos le dijeron que tenía que pagar porque habían pruebas de ello.
Por consiguiente, el sindicalista fue enfático en decir que «hay trabajadores que pase lo que pase van a enfrentar este régimen de tiranía que existen en estas empresas», ya que «no se puede permitir que empresarios, tiranos, maltratadores violadores de derechos humanos, sigan en este país tratando a la gente como quieren».
Estas acciones las gestionarán a pesar de las amenazas constantes de Fito Salume, ya que según estos, «él se jacta de que tiene el control de la Fiscalía y el control de la Embajada Americana, que tiene el control del Ministerio de Trabajo, él se jacta que tiene el control de todo».
«Debemos de admitir que los empresarios en este país algún nivel de fuerza tienen, pero no es para que se jacte de que tiene el control de todo, el día en que las instituciones del Estado estén en manos de un empresario y especialmente de uno como Fito Salume este país se destruye», dijo Castro, quien continuó diciendo que «no puede ser que un empresario solo porque sea millonario pase por encima de los derechos laborales.