Años pasados eran reportadas un promedio de mil personas lesionadas con armas de fuego, mientras que el año pasado hubo menos de 100.
La baja en el número de personas lesionadas es importante y, además se puede traducir en un ahorro para el Estado, pues, atender a un solo paciente lesionado por esta causa puede llegar a un costo de $32,747.
“Es un promedio, hay ciertas herramientas establecidas en los diferentes entes en este caso la Organización Panamericana de la Salud (OPS) como es el PERC (Producción, Eficiencia, Recursos y Costos) que nos permite tener estimaciones y costos y en esto de lesionados por arma de fuego puede llegar a costar más de $32,000”, explicó el ministro de Salud, Francisco Alabi.
Ese monto está distribuido en el traslado en ambulancia al hospital $170.28, atención por máxima urgencia $171.74, sala de operaciones $5,380.36 en cuatro días, Unidad de Cuidados Intensivos $19,304.10 en nueve días, estancia hospitalaria $7,572.90 en 15 días y control de seguimiento $147.92 en cuatro días.
Si el paciente requiere de un ingreso hospitalario más prolongado la cifra podría crecer exponencialmente. Pero tomando como referencia los $32,747 se puede decir que el Gobierno tuvo un ahorro de más de $29.4 millones en el último año al reducir la cifra de lesionados por arma de fuego.
“Esto solo en el tema de arma de fuego, en el tema de arma blanca estamos hablando que al sistema de salud le está costando un poco más de $23,240 la atención”, añadió el funcionario
Asimismo, el país ha ido teniendo mayor seguridad, gracias a las estrategias impulsadas por el Gobierno, el sistema de salud también va teniendo más ahorros que son invertidos en ampliar la cobertura de los servicios, en mejorar los tratamientos para la población en diferentes enfermedades y en optimizar los equipos médicos.
En este sentido,el trabajo ejecutado a lo largo de la actual gestión permitió que el 2022 cerrara como el año más seguro en la historia del país y que se convirtiera en un referente a escala regional en seguridad pública.