Al menos diez personas, de las cuales cinco sin niños, han muerto en el incendio de un edificio de siete pisos declarado en la madrugada de este viernes en Vaulx-en-Velin, una ciudad de cerca de 50.000 habitantes a las afueras la ciudad francesa de Lyon. Además, hay cuatro heridos muy graves.
Según han publicado en una nota de prensa las autoridades regionales, el fuego ha comenzado a las 3.12 horas en un edificio residencial pero el origen todavía se desconoce. Según informa el canal BFM Lyon, las llamas habrían comenzado en el entresuelo y se han propagado hacia las tres primeras plantas del inmueble.
El balance provisional de víctimas a las 6.30 horas es de al menos diez personas fallecidas, de las cuales cinco son menores de edad de entre tres y 15 años, según ha detallado el ministro del Interior de Francia, Gérald Darmanin, en declaraciones a los medios. También hay cuatro personas gravemente heridas y otras 10 heridas leves, de las cuales dos son dos bomberos.
Darmanin indicó también que se desconocen por ahora las causas del siniestro y que esta misma mañana viajará a la zona para supervisar la acción de los servicios de rescate e investigación, en un edificio que está acordonado.
Los servicios de emergencias han llegado al lugar de los hechos a las 3.25 horas. El dispositivo ha contado con 170 bomberos y 65 camiones. El fuego ya se ha apagado pero la operación de rescate sigue en marcha.
Un testigo del incendio relató a la televisión BFM que consiguió llevar una escalera a la fachada del edificio por la que pudo huir en torno a una decena de personas.
Otro testigo apuntó como posibles culpables a ocupantes ilegales, que son comunes en las plantas bajas de los edificios en invierno en la zona, y que, según él, hacen «invivible» la situación.
Ambos relataron que se oían llantos de niños y voces de adultos gritando «salvad a mi hijos».
Un portavoz de los bomberos señaló al mismo canal que la propagación del fuego fue «extremadamente rápida» y recordó que en este tipo de incendios la propagación del humo por las escaleras hace «muy difícil» la evacuación.
La Fiscalía de Lyon (este de Francia) ha abierto una investigación por el incendio y no descarta la pista criminal. En un comunicado publicado este viernes, la Fiscalía indica que los servicios de la dirección en la zona de la Policía Judicial se encargan de la investigación, que deberá determinar las circunstancias y las causas del incendio y que «no se descarta ninguna hipótesis, en particular la pista criminal».
La alcaldesa, la socialista Hélène Geoffroy, que dijo desconocer los motivos del incendio, también contó que la evacuación del edificio, en el que hay una treintena de viviendas, exige realojar a 88 personas.
Pero una televisión local mostró las imágenes de algunos vecinos que increpaban a la alcaldesa por no querer decir claramente que, a juicio de estos, había un problema con la acción de los supuestos narcotraficantes. En declaraciones al periódico regionalLe Progrès, algunos habitantes acusaron a los camellos que supuestamente ocupaban y utilizaban para el trapicheo de drogas los bajos de este edificio de viviendas en Mas le Taureau, un barrio popular de Vauxl-en-Velin, una ciudad de cerca de 50.000 habitantes a las afueras de Lyon.
Un vecino, que se identificó como Sami, se quejó de que, según su versión, los responsables quieran ocultar que el suceso «viene del punto de trapicheo en la planta baja. Ahí comenzó el incendio. He visto a niños saltar del balcón. Era horrible». Otro vecino insistió en el mensaje de que ahora lo que hace falta es mostrar «solidaridad» con las familias de las víctimas ante un siniestro por el que «todos estamos afligidos».