Tras abrir las puertas de su hogar y de su realidad en su nueva serie documental de seis capítulos de Netflix, la vida de Meghan Markle y el príncipe Harry, con sus respectivas polémicas familiares y decisiones controvertidas tras su desvinculación de la Casa Real británica se refiere, está en boca de todos.
En medio del ciclón mediático, la secretaria de prensa global de los duques de Sussex, Ashley Hansen, ha expresado que la salida de la pareja de la casa real no tuvo nada que ver con la búsqueda de privacidad. Responde así a las críticas que les reprochan que hayan firmado un contrato multimillonario con la plataforma que incluye «mostrar los detalles ocultos de su historia», según ha manifestado la propia Meghan y se ha podido ver en el formato dirigido por la cineasta Liz Garbus.
Tal y como ha explicado Ashley aThe New York Timeseste viernes, «su declaración anunciando su decisión de dar un paso atrás no menciona nada de privacidad y reitera su deseo de continuar con sus roles y deberes públicos». La idea del matrimonio no fue, según asegura, alejarse del foco público, sino, como ellos mismos comunicaron de forma conjunta, «ser financieramente independientes, sin dejar de apoyar plenamente a Su Majestad la Reina». «Es con su aliento, particularmente durante los últimos años, que nos sentimos preparados para hacer dar este paso», transmitieron hace casi tres años en el momento del impactante anuncio.
Ahora, con su propia versión de la historia filmada y al alcance de todos, se ha mostrado con detalles la complicada relación que mantienen con los medios de comunicación, un vínculo que, según dicen los protagonistas, se deterioró más todavía desde que tomaron aquella determinación. «Están eligiendo compartir su historia, en sus términos, y, sin embargo, los tabloides han creado una narrativa completamente falsa que impregna la cobertura de prensa y la opinión pública. Los hechos están justo al frente de ellos», ha añadido la portavoz de los duques de Sussex, un mensaje que coincide con las quejas y denuncias que Meghan hace en la tercera entrega de la serie, cuando afirma que «se crearon historias lascivas» en la prensa antes de contraer matrimonio con Harry en mayo de 2018.
«Estábamos jugando whack-a-mole todos los días. Todos los días era como ‘Espera, apareció otro. Espera, detente, otra historia’. Así, constantemente», asegura Meghan ante las cámaras de Netflix, que han contado de primera mano sus vivencias y explicado su elección de comenzar una nueva vida en Estados Unidos, algo que, en palabras de Harry, hizo «para proteger a mi familia, sobre todo después de lo que le pasó a mi madre. No quería que la historia se repitiera”. Aunque él aceptó y asumió en todo momento que «habrá gente en todo el mundo que no esté de acuerdo con lo que he hecho y cómo lo he hecho», aquel gran paso cambió radicalmente su vida como podemos ver en la pequeña pantalla.