El 02 de noviembre, cientos de salvadoreños conmemoran el Día de los Fieles Difuntos, fecha significativa en la que se recuerda a todos aquellos seres queridos que formaron parte de nuestras vidas y que desde cierta perspectiva se nos adelantaron en el camino de la vida y tuvieron que partir.
Dentro de este día de reflexión y de espiritualidad, son muchas las familias que siguen conservando la tradición de acudir juntos a los camposantos y llevar simbólicamente flores coloridas y adornos naturales o artificiales a las personas que siempre recordarán.
Asimismo las familias suelen este día disfrutar de una variedad de platillos típicos que se han vuelto por décadas infaltables de degustar, caso específico el de las famosas HOJUELAS, platillo que es considerado una merienda tradicional que acompaña a la celebración del Día de los Difuntos.
Este antojito se caracteriza por ser una rica y azucarada mezcla de masa a base de harina de trigo que se fríe al punto de quedar crocante y muy doradita.
Para acompañar, se sirven con miel, que puede elaborarse con panela.