Un taxista de Moscú ayudó a salvar la vida de un perro de raza corgi que fue atropellado en presencia de su dueño ofreciéndose a transportar al animal hasta una clínica veterinaria, mientras que el conductor responsable del atropello se dio a la fuga.
«El dueño del perro estaba en choque, no podíamos dejarlo solo con el perro herido en brazos en la calle, así que lo llevé a una clínica veterinaria», relató el taxista, quien en ese momento estaba transportando a una pasajera, que aceptó ayudar al can, llamado Charlie.
El dueño del animal declaró que «no todo el mundo se ofrecería a llevar a un perro herido a una clínica y estaría dispuesto a gastar el tiempo para ayudar a un extraño», agregando que el taxista ni siquiera le cobró el viaje, a pesar de que tuvo que hacer un gran desvío antes de poder seguir con su ruta inicial.
La historia tuvo final feliz para Charlie, que no sufrió heridas graves y ya pudo volver a casa.