Matrix Resurrections ha logrado superar los 140 millones en taquilla desde su estreno en cines y HBO Max -en Estados Unidos-, generando numerosos debates sobre su rentabilidad y su significado como película de ciencia ficción. Mientras la crítica especializada y el público se divide, parece que el regreso de Neo y Trinity, dirigido en solitario por Lana Wachowski, no ha estado a la altura de lo que Warner esperaba.
Matrix Resurrections fue, desde el mismo comienzo, una apuesta arriesgada de Warner Bros. Y, como se confirma en Hollywood Reporter, parece que han acabado perdiendo luego de confirmarse que el estreno en China no ha salido como se esperaba. No obstante, hablamos de una colosal superproducción en la que se habrían invertido 190 millones de dólares, más gastos de promoción, una cantidad enorme en tiempos de coronavirus e incertidumbre económica. Además, el éxito de Spider-Man: No Way Home, una de las películas más taquilleras de la historia, le habría dado la puntilla.
También tenemos que comentar que Matrix Resurrections en Estados Unidos se estrenó de manera simultánea en la plataforma de HBO Max, algo que ha llevado al filme a conseguir unos paupérrimos 35,8 millones de dólares en los cines del país, cifra que sumada lo que ha ingresado a nivel mundial, la llevaría a alcanzar los 140 millones. Muy poco para la major. Si descontamos lo que se llevarán los exhibidores o los gastos en marketing, Matrix Resurrections tendría que recaudar el doble o más de lo que habría costado. Y ese número está muy lejos. Por eso, cuando Warner comenzó a hacer números se enfocó en la rentabilidad del filme en el mercado chino.
Matrix Resurrections se estrenó en el país asiático el pasado viernes 14 de enero, y apenas consiguió 7,5 millones de dólares en su primer fin de semana. ¿Por qué se la ha pegado allí? Los analistas creen que hay varios factores. El primero de ellos, la idea del desinterés general de la saga. Y el segundo, la circulación de copias piratas extraídas de la versión digital de la película en HBO Max. La producción protagonizada por Keanu Reeves no tiene el gancho suficiente para conquistar al público. Teniendo en cuenta la trama y todas las dificultades experimentadas por la película, parece que el universo cinematográfico de Matrix podría haber terminado aquí.
