El Juzgado Especializado de Sentencia de Santa Ana impuso 200 años de cárcel a una treintena de sujetos acusados de 11 homicidios. Entre ellos, a los autores del triple crimen cometido en perjuicio de tres hermanos, quienes fueron reconocidos sin vida el 10 de febrero del año 2018 en un predio baldío de la ribera del río Sucio, en la hacienda San Francisco, en Santa Ana.
Para esclarecer el triple homicidio y el resto de crímenes, el testigo al que se le otorgó criterio de oportunidad y se le dio régimen de protección con clave “Adonis”, explicó que el 29 de enero del año 2018, en la mañana recibió un audio vía WhastApp de parte de un sujeto que le dijo que en la 25ª Calle Poniente andaban tres sujetos a bordo de un Honda Azul, comprando repuestos para carro y al parecer eran pandilleros, por lo que lo mandó a verificar la situación y que si no eran pandilleros que los dejara ir; y que si eran de la pandilla que los llevara a la colonia Santa Margarita, carretera a Metapán, pero que antes pasara a la colonia El Bosque a donde otro pandillero a recoger un arma de fuego.
El testigo “Adonis” hizo todo lo que le dijeron y cuando otros sujetos ya habían privado de libertad a los tres hermanos, “Adonis” se fue hasta el hotel donde los tenían encerrados. En el lugar, “Adonis” les dijo: “¿Qué ondas la Dieciocho en grande?”; y una de las víctimas le respondió haciéndole señas con las manos, ademán que el testigo identificó como seña de la pandilla Dieciocho. Luego, la víctima le dijo que a ellos los conocían como “Los Polleros”, en la colonia Cuzcachapa, de Chalchuapa, porque los tres eran hermanos.
Cuando los sujetos comprobaron que pertenecían a la pandilla contraria, los movilizaron a un lugar rústico de la colonia Santa Margarita, donde caminaron por veredas hasta llegar a un río. Estando en el lugar les grabaron un vídeo y les volvieron a preguntar si eran miembros de la Pandilla Dieciocho, a lo que respondieron nuevamente que sí.
Luego, los sujetos enviaron el video para pedir el aval para asesinar a las tres víctimas. Al tener la respuesta positiva, comienzan a cavar un hoyo. Luego, uno de los verdugos se quitó la camisa y les enseñó las letras MS tatuadas en el pecho; y les dijo que los matarían. Para ello, fueron asesinando a uno por uno, utilizando una barra de hierro y machetes. Luego, utilizaron la misma tierra que excavaron para tapar la tumba y le tiraron maleza seca y un árbol encima para evitar que alguien sospechara que se trataba de una tumba.
pena de muerte art 2021