El papa Francisco pidió este domingo 29 de julio que en las casas no se desperdicie la comida que sobra y recomendó darla a otras personas que lo necesiten o volverla a cocinar, tras el rezo del Ángelus dominical en la plaza de San Pedro del Vaticano.
El pontífice basó su discurso en el episodio del Evangelio en el que Jesús de Nazaret multiplicó los panes y los peces y recordó a «la gente que tiene hambre» en el mundo actual.
«¿Cuántas sobras de comida desperdiciamos? Que cada uno piense dónde acaban los alimentos que sobran en la comida o la cena ¿Qué hacemos en casa con las sobras?», cuestionó el papa ante los 25.000 fieles que lo escuchaban, según cifras de la Gendarmería vaticana.
Francisco aconsejó preguntar qué se hacían con la comida que sobraba a los abuelos que vivieron las penurias de la posguerra.
«No desperdiciéis nunca la comida que sobra. O se vuelve a hacer o se da a quien pueda comerlo, a quien lo necesite. No tiréis nunca las sobras», zanjó el papa, que llamó a sus fieles a realizar un «examen de conciencia» sobre sus hábitos en este sentido.
Francisco instó a no ser «espectadores» frente al «grito de hambre de tantos hermanos y hermanas», y condenó la «plaga» de la trata de personas. «Frente al grito de hambre de tantos hermanos y hermanas en cada parte del mundo, no podemos permanecer espectadores distantes y tranquilos», afirmó el Papa.
El anuncio de Cristo, pan de vida eterna, requiere de un generoso compromiso de solidaridad para los pobres, los débiles, los últimos, los indefensos. Esta acción de proximidad y de caridad es la mejor verificación de la calidad de nuestra fe, tanto a nivel personal como a nivel comunitario», añadió.
El Pontífice destacó que «el amor de Dios por la humanidad hambrienta de pan, libertad, justicia, paz, y sobre todo de su gracia divina, no desfallece».
El Papa argentino explicó que el pasaje bíblico de la multiplicación de los panes y los peces «nos muestra nuevamente a Jesús atento a las necesidades primarias de las personas».
En tanto, en vísperas del Día Mundial contra la Trata de Personas, promovida el lunes por la ONU, denunció esa «plaga» que «reduce a esclavitud a muchos hombres, mujeres y niños con el fin de la explotación laboral, sexual, comercio de órganos, de la delincuencia forzada. También acá en Roma.
«Las rutas migratorias son a menudo utilizadas por traficantes y explotadores para reclutar nuevas víctimas de la trata», dijo Francisco.
«Es responsabilidad de todos denunciar las injusticias y contrarrestar con firmeza este crimen vergonzoso», señaló.
Agencias EFE, ANSA Y CLARÍN.
PIDIÓ QUE SE LAS MANDEN A TDOS LOS CURAS PEDOFILOS
Y si el vaticano sacara todas sus riquezas para disyribuirla entre la gente mas pobre del mundo?
Aja y si dejaran de gastar tanto en el cuando el viene en sus jiras..q no se pudiera aser con ese dinero mejor q de calle..el representante de Dios en la tierra ..sera el representante del diablo