Según las autoridades de la Fiscalía General de la República, el testigo ejercía como publicista para el Gobierno de esa época.
La Fiscalía General de la República (FGR) aseguró que un testigo criteriado, quien ejerció como publicista para la campaña gubernamental en el 2004, a cargo del expresidente Elías Antonio Saca, recibió un total de $7 millones por sus servicios.
Según el fiscal del caso, el negocio era que CAPRES iba a pagar $100 mil mensuales por el trabajo, pero que las cuñas radiales se iban a difundir únicamente en las cinco empresas del Grupo Radial Samix.
«En el año de 2004, lo llaman a efecto que se trabajara con la publicidad. Entonces le dice (Antonio Saca) que CAPRES le iban a entregar $100 mil mensuales a este testigo para efecto de realizar publicidad. Sin embargo, la publicidad se tenía que realizar en las empresas del Grupo Radial Samix», dijo el fiscal encargado.
Según la fiscalía, esto complementaría a la «suficiente documentación» que se tiene y a un total de 100 testigos (de los cuales tres han recibido beneficios judiciales a cambio de contar cómo se operaba en CAPRES para ese tiempo) con lo cual se estaría sustentando el desvío de dinero, delito por lo que se acusa al exmandatario.
No obstante, la Fiscalía también señaló que no han podido encontrar el destino de $191 millones del Estado, y aseguran que es porque el dinero fue extraído de unas cuentas del Estado y cambiado en efectivo; por lo que no se puede concluir para qué fue utilizado.
El Juzgado Cuarto de Instrucción es el escenario donde se desarrolla el caso del expresidente Saca, sin embargo el juez Rigoberto Chicas, no ha permitido el ingreso a ningún medio de comunicación a la audiencia preliminar, a pesar de que el caso «no tiene reservas» según lo habían informado los abogados y la FGR.