El Departamento de Defensa de EE.UU. confirmó el 14 de agosto la creación de un grupo de trabajo para estudiar objetos voladores no identificados (ovnis).
El establecimiento del Grupo de trabajo sobre fenómenos aéreos no identificados (UAPTF, por sus siglas inglés), cuya misión será «detectar, analizar y catalogar» los ovnis que «puedan representar una amenaza potencial para la seguridad nacional de EE.UU.», fue aprobado el 4 de agosto por el vicesecretario de Defensa de EE.UU., David L. Norquist.
«El Departamento de Defensa y los departamentos militares se toman muy en serio cualquier incursión de aeronaves no autorizadas en nuestros campos de entrenamiento o espacio aéreo designado y examina cada reporte» al respecto, precisaron.
A finales de abril, el Pentágono hizo públicos oficialmente tres videos de corta duración con ovnis grabados por pilotos en los años 2004 y 2015. Las imágenes muestran «fenómenos aéreos no identificados» de objetos que se desplazan rápidamente por el aire mientras son grabados con cámaras infrarrojas. En septiembre del año pasado, la Armada de EE.UU. ya reconoció la veracidad de los videos y, tras «una revisión exhaustiva», el Pentágono determinó que estas grabaciones «no revelan capacidades o sistemas sensibles, y no afecta a las investigaciones posteriores de incursiones en el espacio aéreo militar por fenómenos aéreos no identificados».
El Departamento de Defensa esgrimió que publicó los videos «para aclarar cualquier idea errónea de la sociedad sobre si las imágenes que han estado circulando eran reales o no, o si hay más en los videos».
Días después de la publicación, el presidente de EE.UU., Donald Trump, se mostró escéptico sobre el asunto y puso en duda la autenticidad de las imágenes. «Me pregunto si es real. Es una locura de video», señaló.
En diciembre del 2017, el Departamento de Defensa de EE.UU. reconoció haber financiado un programa secreto multimillonario para investigar avistamientos de ovnis, el llamado Programa Avanzado de Identificación de Amenazas Aeroespaciales (AATIP, por sus siglas en inglés), aunque aseguró que había terminado en el 2012. Sin embargo, algunos medios informaron que el programa aún estaba en funcionamiento.