Mientras restan dos fechas para finalizar la Liga de España y aún mantienen la ilusión de poder arrebatarle el título al Real Madrid, el Barcelona sorprendió con el desconocido fichaje de un delantero en las últimas horas. No se trata de Lautaro Martínez, a quien todos los medios lo colocan como la novela de este merca de pases, sino de un jugador brasileño de apenas 19 años.
Su nombre es Gustavo Maia da Silva y el Blaugrana decidió invertir la módica suma de 4,5 millones de euros por la ficha del futbolista del San Pablo de Brasil. Fue así que el elenco catalán dio la nota al comprar una de las joyas de la cantera del club paulista que ni siquiera tuvo su debut oficial con la camiseta del Tricolor (apenas integró el banco de suplentes en una ocasión ante el Botafogo en marzo).
Desde los medios brasileños señalaron que si bien la oferta es un tanto moderada al tratarse de un jugador de esas características, en el Morumbí aceptaron sin más vueltas debido a la urgencia económica en la que se encuentra la institución después de la crisis financiera que dejó la pandemia del coronavirus en el fútbol.
Apremiados por un balance que cerró en rojo y la deuda que mantiene con los salarios de su plantel profesional, desde San Pablo tomaron la decisión de poner en vitrina a varias promesas de su escuadra para poder afrontar el déficit financiero. Algo similar ocurrió con el extremo Antohny Matheus dos Santos, de 20 años, quien quedó en manos del Ajax de Holanda por la suma de 15,7 millones de euros.
Fue así que ante el talento prematuro de Maia, el Barça decidió apostar por el joven y sumarlo a sus filas. Seguramente, el diestro recalará en el Barcelona B, fillial del Culé y al mando del entrenador Francisco Javier García Pimienta para formarse y adaptarse a la filosofía de juego de uno de los equipos más grandes del mundo.
De esta manera, el Barcelona consiguió abrochar su quinto refuerzo en este mercado de pases. Antes, había incorporado al bosnio Miralem Pjanic -en un trueque con la Juventus a cambio del brasileño Arthur- y a los jóvenes Trincao (del Braga de Portugal, 20 años), Matheus Fernandes (del Palmeiras, 22 años) y Pedri (de Las Palmas, 17 años).