Sindicalistas protestaron esta tarde sobre la alameda Juan Pablo II, frente a las instalaciones de la alcaldía de San Salvador, para denunciar una supuesta intención de privatización del servicio de recolección de desechos sólidos en la ciudad capital. La protesta generó tráfico vehicular en la zona.
«No vamos a permitir la privatización de los colombianos en la alcaldía de San Salvador», denunciaron agremiados de la Asociación Salvadoreña de Trabajadores Municipales (ASTRAM) y del Sindicato de Trabajadores Municipales de la Alcaldía de San Salvador (STAMSS).
Según los trabajadores, el alcalde Ernesto Muyshondt ha entablado negociaciones con un grupo de empresarios de origen colombiano -que conformaron un asocio público privado con la alcaldía de Santa Tecla en 2018 para encargarse de la recolección de basura en dicha ciudad-, «lo que generaría en San Salvador el despido de 1,600 trabajadores», dijeron.
De igual forma, los manifestantes agregaron que si dicha privatización se logra concretar, no solo perderán el trabajo «miles de compañeros», sino que además se incrementarían las tasas «en un 1,500%» para poder pagar el servicio, y ejemplarizaron con lo ocurrido en Santa Tecla donde se despidió a 154 trabajadores y ahora los tecleños pagan más por la recolección de los desechos sólidos.
Los agremiados dijeron que van a intensificar las protestas durante los próximos días, y que podrían llegar a la suspensión de labores, así como exigieron la conformación de una mesa negociadora entre las autoridades y los líderes sindicales.
Por otra parte, el ministro de Trabajo, Rolando Castro, quien viene del movimiento sindical, validó esta mañana las protestas y destacó que ASTRAM es una organización histórica desde 1978. «Tiene una solidez fuerte y experiencia», dijo, y a la vez invitó a las partes a convocar una mesa de diálogo para abordar las inquietudes.
«Yo lo que insto es a las partes, ASTRAM y a la Alcaldía, a entenderse a través del diálogo y la negociación», finalizó.
Esto parece mas bien politico de algun nuevo partido siempre alterando a la gente sin fundamento ni base que tristeza.