Parece que por fin, luego de tres elecciones presidenciales sin ningún aspirante opositor, Florentino Pérez tendrá después de doce años en el máximo lugar en el Real Madrid un contrincante en 2021. Se trata del poderoso empresario naviero valenciano Vicente Boluda, quien justamente le entregara el poder en 2009 cuando quedó interinamente a cargo del club ante la renuncia de Ramón Calderón.
La historia de Boluda como presidente interino del Real Madrid comienza el 13 de enero de 2009, cuando se descubrió que en una asamblea del club, el entonces presidente Calderón había infiltrado a socios que no reunían la condición de compromisarios, y a personas que ni siquiera eran socias y muchos de ellos, íntimos del mandatario, como su hermano Ignacio y su hijo Jaime. Pese a la primera rotunda negativa sobre estos hechos, Calderón se vio obligado a renunciar.
Tres días después, Boluda llegaba a la presidencia blanca como interino, en un mandato que duraría menos de seis meses porque el 1 de junio le entregó el cargo a Florentino Pérez, quien asumía por segunda vez en su vida (había renunciado el 27 de febrero de 2006 luego de casi seis años como mandatario), tras imponerse en las elecciones como único candidato. En aquel acto, Boluda le deseó “de corazón, la mejor de las suertes” y le ofreció “ayuda y apoyo”.
El Real Madrid, a mediados de 2009 cuando Boluda le entregó la presidencia a Pérez, no se encontraba en el mejor momento. El Barcelona acababa de ser campeón de Europa con Josep Guardiola de entrenador y poco antes le había propinado una tremenda goleada a los blancos en el estadio Santiago Bernabeu por 2-6.
Ese Real Madrid, en el que atajaba Iker Casillas y ya defendían Sergio Ramos y Marcelo, y atacaba Raúl, contaba con los argentinos Gabriel Heinze, Fernando Gago y Gonzalo Higuaín, y había sido derrotado por el Real Unión de Irún, de la Segunda B (Tercera División española) en dieciseisavos de final de la Copa del Rey, tras empatar en el global de los dos partidos 6-6 y por el gol de visitante. Tampoco había logrado pasar de los octavos de final de la Champions League, dirigido por Juande Ramos, al caer ante el Liverpool por un global de 5-0. Antes de enfrentar a los ingleses, Boluda recorrió los programas radiales y realizó una de sus pocas declaraciones recordadas, cuando aventuró que su equipo le ganaría a los Reds 3-0 en Madrid y 2-1 en Inglaterra “porque necesitarán ganar, ellos se van a abrir y les vamos a chorrear”. Pero las cosas fueron muy diferentes.
Boluda anunció su candidatura a la presidencia del Real Madrid para las próximas elecciones de 2021 en una cena de la Asociación de Empresarios Valencianos (AVE), que preside. Se trata de un lobby que viene reivindicando un corredor ferroviario mediterráneo y la reforma del modelo de financiación autonómica en España.
En ese ágape, Boluda manifestó que reúne el dinero para poder presentarse en los comicios, que tiene en mente tres fichajes de jugadores estrella y dijo que “hay franceses que son muy buenos”, lo que muchos vincularon con un intento por traer al Real Madrid al joven delantero campeón mundial del PSG, Kylian Mbappé.
Pero además, el empresario naviero dio interesantes definiciones políticas sobre el Real Madrid, cuando sostuvo que se presenta para garantizar que haya un proceso electoral en el club y un candidato alternativo a Florentino Pérez tras doce años sin oposición. “Tiene que haber un presidente diferente al que está –afirmó- porque es un cargo que lo multiplica todo. Vas a muchos sitios y creen que la capital de España se llama Real Madrid”, y llegó a unir sus actividades privadas con lo que ocurre hoy en los partidos del Santiago Bernabeu: “Pareciera que los problemas de la financiación de la comunidad valenciana pudiera solucionarse en los palcos”, en referencia a que se suele comentar que en la zona noble del estadio, muchos empresarios y políticos van durante los partidos a hacer negocios o pactos.
“No sé si ganaré pero se puede intentar. Habrá que tener opción porque antes no hubo opción”, indicó Boluda en la comida de los empresarios valencianos. “Yo ya lo tenía decidido desde antes, pero al cambiar el estatuto, cambiaron la edad para ser presidente pero me gustaría porque al Madrid lo llevo en el alma y en el corazón. Lo que más me duele es que hay que devolver el club a sus socios y el club se ha distanciado de los socios”, señaló luego al programa El Larguero de la Cadena SER.
Se refiere a los importantes cambios que introdujo Florentino Pérez al estatuto del club el 30 de septiembre de 2012: se modificó uno de los requisitos para ser candidato a presidente de los diez a los veinte años de antigüedad como socio, y si la Ley del Deporte español decía que en los clubes que no son S.A., los candidatos deben avalar con el 15 por ciento del presupuesto, se agregó “con el patrimonio personal como única y exclusiva garantía” (según Pérez, para blindarse ante el intento de que cualquier magnate o jeque entre al club, avalando a otro desde afuera). La otra gran modificación fue la introducción del voto por correo ante notario al margen del correo público (Correos).
“La modificación de los estatutos persigue enredar para alejar del club a los socios. No entiendo por qué hay que tener más de veinte años de socio para ser presidente porque en ningún club del mundo existe una exclusión semejante. Excluye así a 90.000 socios. No hay ningún motivo para poner este requisito, salvo que Florentino quiera eliminar competidores en las próximas elecciones. No me imagino quién podrá hacerle oposición, pero la poca que puede cumplir con las condiciones ya impuestas, estará muerta. Yo, que he sido presidente y además, ratificado por la asamblea, no podría volver a ser presidente ni ahora ni dentro de cuatro años porque en 2017 me faltará un mes para los veinte años como socio. Si cualquier ciudadano español mayor de edad puede ser presidente de todos los españoles, ¿por qué el Real Madrid impone esta exclusión?”, se preguntaba ya en ese entonces Boluda, muy distanciado de Pérez a tres años de entregarle el mandato.
Pérez, que fue presidente del Real Madrid entre 2000 y 2006, regresó en 2009 como único candidato, y desde entonces no tuvo contrincante en las otras dos elecciones, en 2013 y en 2017.