Tras su sonrojante derrota en el Ciutat de València ante el Levante (3-1) en Liga, el Barcelona tiene una oportunidad este martes (18:55 horas) de rehabilitar su imagen contra el Slavia de Praga, al que recibe en la cuarta jornada de la Liga de Campeones con el objetivo de encarrilar su clasificación para los octavos de final de la competición.
Los azulgranas siguen invictos en esta Champions (dos victorias y un empate) y colideran la competición doméstica, pero su fútbol dista mucho del que se espera de un equipo plagado de estrellas que aspira, una temporada más, a pelear por todos los títulos.
Ya acabaron pidiendo la hora hace dos semanas en Praga, donde sufrieron lo indecible para derrotar al Slavia a domicilio (2-1). También tuvieron que sudar tinta para doblegar al Inter en el Camp Nou (2-1) y salieron vivos de milagro de Dortmund (0-0).
Este martes los azulgranas tendrán una nueva oportunidad de subir el nivel -algo necesario si se quiere ir con garantías por Europa- ayudados por su condición de local, pues el juego del equipo sube algunos enteros cuando el partido se disputa en el Camp Nou.
Lo hará, no obstante, sin su ‘9′ titular, el uruguayo Luis Suárez, que se lesionó en el soleo ante el Levante. El puesto del delantero en el once debería ser para Ousmane Dembélé, a quien Valverde no convocó para el último partido de Liga. El resto del once será el habitual, por lo que Jordi Alba y Sergio Busquets recuperarán la titularidad en detrimento de Sergi Roberto y Arturo Vidal.
Invicto en el torneo liguero y con una ventaja a mitad de temporada de doce puntos respecto al segundo clasificado, el Slavia, por su parte, afronta su duelo en el Camp Nou dispuesto a repetir el buen juego de hace dos semanas ante los azulgranas, pese a perder entonces en casa por 1-2.
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El conjunto checo ha sumado un empate y dos derrotas en la actual edición de la Liga de Campeones, unos resultados que no reflejan el buen hacer de los pupilos de Jindrich Trpisovsky, que ha levantado la admiración de sus rivales del grupo F gracias al desborde y a la movilidad de sus laterales Vladimir Coufal y Jan Boril.