Un importante asesor del presidente Donald Trump testificó el martes que quedó tan preocupado tras escuchar al republicano pedirle al mandatario de Ucrania que investigara a un rival político local, que informó la situación a un abogado de la Casa Blanca por sus inquietudes sobre la seguridad nacional.
El teniente coronel del Ejército Alexander Vindman, director de asuntos europeos del Consejo de Seguridad Nacional, se convirtió en la primera autoridad de la Casa Blanca en funciones que testifica en el marco de la investigación de la Cámara de Representantes sobre un posible juicio político contra Trump.
Vindman, un ciudadano estadounidense nacido en Ucrania y veterano condecorado de la guerra en Irak, también se convirtió en la primera persona que ha testificado y que escuchó la llamada telefónica del 25 de julio en el centro del escándalo.
«Me preocupó la llamada», dijo Vindman en su declaración inicial ante las tres comisiones de la Cámara baja que realizan la investigación sobre juicio político impulsada por los demócratas.
«No creo que fuese correcto exigir a un gobierno extranjero que investigue a un ciudadano de Estados Unidos, y me preocupaban las consecuencias para el apoyo de Estados Unidos a Ucrania», agregó.
Durante la llamada telefónica, Trump pidió al presidente de Ucrania, Volodymyr Zelenskiy, que investigara a Joe Biden, exvicepresidente y rival político demócrata, y a su hijo Hunter, quien sirvió en el directorio de la compañía de gas ucraniana Burisma.
Trump también solicitó a Zelenskiy que investigara una teoría conspirativa desmentida que sostiene que Ucrania, y no Rusia, interfirió en la elección presidencial de Estados Unidos en 2016.
El presidente estadounidense retuvo 391 millones de dólares en ayuda en seguridad para Ucrania aprobada por el Congreso, para enfrentar a separatistas apoyados por Rusia en la región oriental del país. Zelenskiy accedió a las peticiones de Trump. La ayuda fue entregada posteriormente.
Vindman, quien se presentó luego de recibir una citación de los legisladores, recordó haber escuchado la llamada.
«Me di cuenta de que si Ucrania realizaba una investigación a los Biden y a Burisma, posiblemente sería interpretado como una jugada partidista que indudablemente resultaría en que Ucrania perdería el respaldo bipartidista que ha mantenido hasta el momento. Eso socavaría la seguridad nacional de Estados Unidos», dijo en su testimonio.
Después de la llamada, agregó Vindman, informó sus preocupaciones al principal abogado del Consejo de Seguridad Nacional. La llamada motivó una queja de un informante de la comunidad de inteligencia, cuya identidad no ha sido revelada, y dio origen a la investigación sobre un juicio político.
En su declaración, Vindman negó ser el informante o conocer la identidad de la persona.
El martes, Trump tuiteó que la investigación era una “farsa”.
“Por qué hay personas de las que nunca he escuchado que testifican sobre la llamada. Acabo de leer la transcripción de la llamada y ¡se acabó la farsa de juicio político!”, escribió.
Más temprano se conoció que Vindman, un oficial de 20 años de experiencia militar y veterano condecorado, testificaría que reportó sus preocupaciones por primera vez después de una reunión del 10 de julio en la que el embajador de Estados Unidos ante la Unión Europea, Gordon Sondland, destacó la importancia de hacer que Ucrania investigara la elección presidencial de 2016 y a Burisma, una compañía vinculada a la familia de Joe Biden, precandidato presidencial demócrata para los comicios de 2020.
Vindman dijo que le comentó a Sondland que “sus declaraciones fueron inapropiadas, que la solicitud de investigar a Biden y a su hijo no tenía nada que ver con la seguridad nacional, y que el NSC no se iba a involucrar ni a verse presionado en ese tipo de investigaciones”.
La versión difiere de la de Sondland, un empresario acaudalado que donó un millón de dólares para la inauguración de la presidencia de Trump y testificó en la investigación de juicio político que nadie del NSC “le expresó alguna vez su preocupación”. También testificó que no estaba al tanto de algún vínculo entre Biden y Burisma.
Respecto a la llamada telefónica entre Trump y Zelenskiy, Vindman dijo que escuchó en la Sala de Crisis de la Casa Blanca junto a colegas del NSC y de la oficina del vicepresidente Mike Pence, y le preocupó lo que oyó. Una vez más reportó sus preocupaciones al abogado principal del NSC, aseguró.
“Me di cuenta de que si Ucrania empezaba a investigar a los Biden y a Burisma, se interpretaría como una maniobra partidista que sin duda resultaría en que Ucrania perdiera el respaldo bipartidista que ha mantenido hasta ahora. Todo esto socavaría la seguridad nacional de Estados Unidos”, escribió.